Lavanda Lavandula angustifolia en maceta de 16 cm. (2,5 litros)
4,95 €
Planta originaria de las regiones del mediterráneo, se cultiva con frecuencia en huertos y jardines y crece de forma espontánea en el campo. Los Romanos se perfumaban con ella después del baño (de lavar, Lavandula) y llevaban un ramo de lavanda entre las ropas para ahuyentar a los insectos y emanar un suave y delicado aroma. Las flores de la lavanda son de color azul-violáceo y se agrupan en espigas muy aromáticas que proporcionan un olor característico. La planta florece en verano y la recolecta de las flores para uso medicinal se lleva a cabo en los meses de julio y agosto. Se recolectan las flores cuando están abiertas, ya que la parte interesante es la sumidad florida, así que el mejor momento para coger lavanda es elegir un día soleado y bien entrada la mañana. Como contiene componentes alcohólicos, se debe secar a la sombra y a una temperatura inferior a los 35 ºC. A mayor temperatura se evaporan los alcoholes, se altera la esencia y se pierde la actividad terapéutica de la planta.